sábado, 30 de junio de 2012

Reencuentro con otra vida...


Muchas veces he pensado que pertenezco a otro lugar, a otra era...mi esencia así lo dice. Dicen que vivimos muchas vidas, que nuestras almas siguen en este plano producto de las reencarnaciones que hemos experimentado. Aunque no esté  100% confirmado, creo que eso es verdad. A más de alguien le ha sucedido que al ir por primera vez a un lugar, siente que ha estado ahí antes, bueno, yo al ver algunas imágenes, al escuchar música celta, me transporto inmediatamente a paisajes rodeados de bosques, castillos, cabalgando rumbo a alguna batalla o viviendo en el mundo de las hadas. ¿Será sólo mi imaginación?, ¿serán tantas las ansias de pertenecer realmente a ese mundo que yo misma creo todas esas imágenes y sensaciones en mi cabeza?, no sé si algún día encuentre la respuesta, pero mi corazón siempre ha estado ligado a todos esos sueños...

Sin quererlo, un triskel celta se ha transformado en parte de mi vida, mucho antes de que me llamase la atención esta cultura y me he rodeado de ciertas personas que comparten el gusto por el mundo de las hadas, lo místico, la simbología, la era medieval...

Poco a poco me he ido encantando con este tema, la belleza de su cultura y sobre todo la importancia que le otorgaban a la naturaleza. Así es como nació esta Sílfide, un hada de aire cuya alma siempre será libre. Un hada amiga de la naturaleza, encargada de mantener el cuidado y la limpieza del aire, formando nubes y lluvia. Amante del campo, la vida más solitaria y el equilibrio del planeta. Un hada con características humanas, pero que en ocasiones se manifiesta en forma de mariposa, libélula u otro ser luminoso...

Aquí les presento a esta hermosa Sílfide, que me acompañará por siempre. Sus alas, son mis alas; su esencia, es mi esencia; su mundo, es mi mundo...

viernes, 1 de junio de 2012

Pasión nocturna...


Noche eterna, envuélveme en tus ganas y perpetúa cada sensación hasta saciarme de ti.


Cólmame de gloriosa pasión con cada susurro de tu seductor silencio,
y déjame estrecharte hacia el placer de lo prohibido...


...Noche, ¡Oh noche, pronto serás mía!, fundiéndonos en un encuentro de locura infinita
y haciendo nuestro el universo, aunque sea por un momento,
desbordando el más oculto de los deseos, 
hasta llevarte a la excitante explosión de los sentidos...