viernes, 4 de mayo de 2012

Sílfide sin rumbo...

Cristal...creo que hoy más que nunca haré honor a mi nuevo nombre, porque me he transformado en una sílfide de cristal. Una sílfide frágil y temerosa ante los acontecimientos de la vida. Muchas veces he hablado de libertad, de emprender el vuelo hacia aquel lugar que tanto busco en mis sueños, pero tengo miedo...miedo a lo nuevo, miedo de volver a caer, miedo de no encontrar el camino correcto, miedo de herir o que me hieran... La felicidad ha dado un pie atrás, dejando estas alas rotas...queriendo volar, herí un corazón; buscando libertad, destrocé un alma... Soy culpable, lo asumo. Culpable de añorar otros vientos, culpable de que mi corazón me pida avanzar sola hacia otros rumbos, pero sobre todo, soy culpable de no querer engañarte ni hacerte sufrir. He sido sincera, por ti, por mí y por todo lo bello que tuvimos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario